Morcilla con Tomate: Un Clásico Renovado
La morcilla con tomate es uno de esos platos que combina sencillez y sabor en cada bocado. Perfecto para disfrutar como tapa, acompañamiento o plato principal, este clásico de la cocina española es fácil de preparar y siempre resulta un éxito en la mesa.
Ingredientes para 4 personas:
-
2 morcillas de cebolla de calidad.
-
400 g de tomate triturado (puede ser natural o de bote).
-
1 cebolla grande.
-
2 dientes de ajo.
-
1 cucharadita de azúcar.
-
Aceite de oliva virgen extra.
-
Sal y pimienta al gusto.
-
Pan rústico o tostado para acompañar.
Preparación paso a paso:
-
Preparar la base: Pela y pica finamente la cebolla y los ajos. En una sartén amplia, calienta un chorrito de aceite de oliva virgen extra y sofríe los ajos hasta que estén dorados. Añade la cebolla y cocina a fuego medio hasta que esté transparente y tierna.
-
Incorporar el tomate: Vierte el tomate triturado en la sartén junto con la cebolla y los ajos. Agrega una cucharadita de azúcar para reducir la acidez del tomate, y salpimienta al gusto. Cocina a fuego lento durante 15-20 minutos, removiendo de vez en cuando para evitar que se pegue.
-
Cocinar la morcilla: Mientras el tomate se cocina, corta las morcillas en rodajas gruesas. En otra sartén con un poco de aceite, dóralas ligeramente por ambos lados. Esto intensificará su sabor y mejorará la textura.
-
Unir los ingredientes: Incorpora las rodajas de morcilla al sofrito de tomate y mezcla con cuidado para que no se deshagan. Cocina todo junto durante 5 minutos más para que los sabores se integren.
-
Servir: Sirve la morcilla con tomate caliente, acompañada de pan rústico o tostado. Este plato también es ideal para disfrutar con un buen vino tinto.
Beneficios de la morcilla con tomate
La morcilla es rica en hierro, proteínas y sabores intensos que complementan a la perfección la frescura y acidez del tomate. Este plato es perfecto para disfrutar en cualquier época del año y destaca por ser tan nutritivo como sabroso.
Consejos para un éxito garantizado:
-
Usa tomate fresco: Si tienes tiempo, utiliza tomates frescos para un sabor más natural.
-
Acompañamientos ideales: Este plato va genial con arroz blanco o unas patatas fritas caseras.
-
Experimenta con especias: Si te gusta un toque más especiado, agrega pimentón o una pizca de comino al sofrito.
Descubre el sabor de lo tradicional
La morcilla con tomate es una receta que enamora por su sencillez y profundidad de sabores. Ya sea para una comida familiar o una reunión con amigos, este plato siempre será un acierto.
¡Prueba esta receta y sorprende a tus comensales con un clásico renovado!